Cañada de los roncaleses

La Valle de Salazar y los ganaderos de ella y de otros valles y lugares de las montañas dicen que es muy notorio á V. Señoría cuan conveniente y necesario sea para el bien público y universal de este Reino la Granjería del ganado menudo y ganado y en aquellas valles y otras de las montañas es el sustento principal que tienen la granjería del dicho ganado sin la que no podría vivir, ni mantenerse. Y le es forzoso para haberle de sustentar, el bajar dicho ganado á los lugares de la Ribera .de este Reino, por ser las montañas tierra tan fria y de tantas nieves y en cada año bajan todos los ganados á la ribera por los meses de Septiembre y Octubre y lo vuelven á subir por el més de Mayo. […]
Y así cuesta la baxada desde Val de Salazar á Sanguessa mas de treinta ó quarenta ducados, y á la subida otro tanto por cada cabaña.
Ley de Navarra, 1604

Esta era una queja típica y continua de los pastores pirenaicos durante siglos, porque tenían que pagar peajes en todos los pueblos de paso. Las Cortes de Navarra intentaban atajar estos desmanes, pero nunca lo conseguía. Situación similar ocurría con las almadías pirenaicas. Pero eso es otra historia.

Las cañadas han sido fundamentales para la economía navarra, y así la diputación decidió estudiarlas y señalizarlas en 1924.

Las dos cañadas más conocidas eran la roncalesa y la salacenca, por los numerosos rebaños de ovejas que bajaban de las montañas en septiembre a pasar el invierno hacia las Bardenas.

Romanzado, como zona de paso, las mantenía en buen estado, uniéndolas con una traviesa, llamada T-17. Para su mantenimiento cobraban peajes, con los cañaderos. A cambio mantenían limpios los pasos y cuidaban las zonas de abrevar y descanso.

La cañada roncalesa pasa de refilón por el este del Romanzado, en la zona de Bigüezal/Biotzari, como resume el reglamento de cañadas de 1936:

Sigue la cañada Real por la carretera de Leire hasta el Monasterio trasponiendo la Sierra por el Portillo de Leire desciende de aquel punto, cruzando la meseta que separa las sierras de Leíre y Biguezal. Entra por media ladera en término de Castillo Nuevo y continúa por el paraje «San Miguel» para alcanzar el «Llano de la Tejeria» y entrar en jurisdicción de Navascués. por el «Portillo de Ollate».